La violencia seduce, hay que asumirlo.
Es totalmente gráfica y por eso se utiliza tanto.
El cine de violencia y de acción es el cine por excelencia.
La cámara se inventó para besar y matar.
Alfonso Ramón, El samurái cool.
Y es que se ha tenido bastante olvidado a este gran director, curioso aficionado de los comics, creador de películas que han dejado sello en múltiples festivales de cine alrededor del mundo y por supuesto uno de nuestros favoritos.
Tenemos a la vuelta de la esquina su nuevo filme “The Hateful Eight”, por lo tanto es obligatorio retomar algunos de sus filmes más icónicos, así como los datos importantes. Sangre y violencia juntas para el disfrute de todos…
Tiempos violentos (Pulp Fiction)
La súper reconocida cinta ganadora de Oscar, Globo y BAFTA; los tres premios por la categoría de mejor guion en 1994. Conformada por Jhon Travolta, Samuel L. Jackson y Uma Thurman (por favor imaginen la nómina) combina 3 historias con la dosis perfecta de violencia y comedia al más puro estilo de Tarantino.
Clasificada por los críticos como la mejor película en la carrera de nuestro director y en lo personal una de las mejores actuaciones que le hemos visto a Jackson, sin duda es obligatoria en nuestra colección.
Recomendación: Baile imperdible de Travolta junto a Thurman, créanme quedó para la posteridad.
Kill Bill
La musa de Tarantino (Thurman) llegó para quedarse con esta película totalmente dramática. En el 2003 conocimos a Beatrix, una asesina que tras despertar de cuatro años en estado vegetativo, busca tomar venganza en contra de cada persona que trató de matarla, ¿Su principal objetivo? Bill.
Así empieza esta fascinante combinación entre cine samurái y spaghetti western; retomando diversos géneros (wuxia, chambara, anime), diferentes estilos musicales, variados estilos de fotografía y finalmente creando algo único.
Dato curioso: La cinta se basa en la novela japonesa Lady Snowblood, escrita por Kazuo Koike.
Recomendación: Disfrutar de la serie de ilustraciones que podemos ver en la primera parte, pues fueron creadas por el propio director a la antigüita.
Bastardos sin gloria (Inglourious basterds)
Final alternativo a la segunda guerra mundial, en donde Brad Pitt se encarga de hacer pasar malos ratos a soldados nazis, Hittler muere quemado en un cine manejado por una bella chica “Francesa” y una actriz alemana termina traicionando a sus compatriotas.
¿Qué más se puede decir? Sólo resaltar la actuación de Christoph Waltz. Disfrutas mucho su muerte al final de la película.
Recomendación: “Rabbia E Tarantella” compuesta por el gran maestro Ennio Morriconne.
Django sin cadenas
Exitosa película, tributo al cine western. Muy ad hoc con la competencia en el año 2012, trata acerca de la explotación de esclavos negros al sur de Estados Unidos, dando un toque fresco a historias ya contadas sobre el tema y por supuesto a la cinta original (1966).
El personaje más querido del filme queda a cargo del actor Christoph Waltz (si, de nuevo), quien demuestra sus variadas facetas como actor consagrado.
Dato Curioso: Excelente actuación por parte de Di Caprio, pues en la vida real corta su mano en una escena más que intensa. Todo el mundo le creyó.
Recomendación: Ver la versión de 1966, comparar estilos y actuaciones.
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